En mi proceso creativo, la investigación personal es fundamental para construir una narrativa propia. Esta se expresa a través de signos identificativos que constituyen un lenguaje visual personal, desarrollado con el tiempo y en continua transformación.

​

La fotografía analógica representa para mí el medio a través del cual construyo un imaginario centrado en la observación de las personas y la manera en que interactúan con el paisaje urbano y el entorno que las rodea. Una parte esencial de esta investigación se concentra en las áreas urbanas.

​

Es en estos espacios donde surge el encuentro entre la naturaleza y la ciudad: un límite difuso, en el que el área urbana se fusiona con un territorio libre —la naturaleza— constantemente sujeto a transformaciones.